Este blog intentará mostrar la realidad en la que nos vemos inmersos todos los días, de una manera absurda, irónica y casi casi surrealista.
24 marzo 2009
La Buena Pipa: "33, DIGA: 33"
05 marzo 2009
La buena pipaapip aneub al: "EL CURIOSO CASO DE BENJAMIN BUTTOM" (porque no siempre las mejores veces son las primeras)
6-Nuestros ex serían viejos y querrían levantarnos a toda costa pero a nosotros no nos moverían un condenado pelo… ¡¡¡¡¡¡Ayayayayayayayayayayayay!!!!!! ¡No me digan que no están saboreando esto como yo! Sólo imaginen la cara nuestra diciéndoles: “No sos vos, soy yo… buscate uno de tu edad”… EDÉN EDÉN EDÉN de las relaciones amorosas truncas que se suspenden en el tiempo en espera de una definición que no llega porque el reloj avanza.
5-Mi hija, por ejemplo, me llevaría a bailar, me esperaría afuera, me preguntaría si llevo los documentos, me diría “que te abran la Coca –Cola adelante, ¿eh?” y seguramente en la entrada del boliche el Patovica me deje afuera porque mi documento acusa 50 años… “Nena, si vas a falsificar, poné una fecha de nacimiento razonable”.
4-En la Primaria podríamos jactarnos de nuestras conquistas amorosas, seríamos expertos (algunos) en el arte amatorio y seguramente la Directora nos haría firmar el libro de disciplina por conducta inadecuada y terminaríamos quemándonos el cerebro en algún consultorio psicopedagógico por “estimulación temprana”, además (y como ahora a los chicos inquietos o rompequinotos se los llama “De atención dispersa”) estaríamos en el Gabinete del colegio cada dos por tres… total no necesitamos aprender nada, hasta que le recomienden a nuestros hijos que debemos repetir de grado porque no estamos maduros para afrontar el curso siguiente.
3-Llegaríamos al Jardín de Infantes con estudios universitarios completos y seguramente nos tildarían de niños genios y nos tendrían de conferencia en conferencia hasta que desapareciéramos.
2-No se notarían los estragos de la vejez porque, en definitiva, el final es parecido al principio y diríamos y haríamos las mismas boludeces que decíamos y hacíamos cuando teníamos tres años.
1-Por fin, la sentencia bíblica: “del polvo vienes y en polvo terminarás” sería cierta…
(Me está gustando un poco más la película ahora)
Podría seguir pero no quiero abusarme de su atención en esta primera entrega del año, así que los voy a dejar con algunas preguntas (empecé con muchos interrogantes y ahora se los dejo a ustedes)
¿Mirarían otra vez para ese lado el día que conocieron el amor? ¿Esperarían toda esa hora y media en el bar de la esquina de la Facultad? ¿Caminarían apuradas por los pasillos sin ver al de anteojitos que nos contemplaba embobado y que unos años más tarde nos puso a parir sólo con la mirada? ¿Volverían a decirle al pobre nabo que nos esperó cinco años: “No me quiero casar, che”? ¿Se cruzarían otra vez con esos amigos que se olvidaron de nosotros justo justo cuando necesitábamos eso: un amigo, o se esconderían detrás del sillón antes de ser vistos? ¿Perdonarían por tercera vez? ¿Guardarían las fotos con mucha historia en el doble fondo del cajón del escritorio? ¿Le darían bola a mamá cuando nos decía “Es un enfermo, largalo”? ¿Qué noche olvidarían y cuál volverían a repetir una y mil veces? ¿Qué palabras no dirían? ¿Cuáles volverían a gritar?
En fin, ir hacia atrás ir hacia atrás hacia atrás atrás ...
¡¡¡HASTA LA SEMANA QUE VIENE ENEIV EUQ ANAMES AL ATSAH!!!