Este blog intentará mostrar la realidad en la que nos vemos inmersos todos los días, de una manera absurda, irónica y casi casi surrealista.
30 septiembre 2008
La Cofradía del Ovario PRESENTA: "LA NOVICIA REBELDE" (para darle un respiro al alma)
24 septiembre 2008
La Buena Pipa y los Servicios de Auxilio Mecánico
17 septiembre 2008
La Cofradía PRESENTA: "COMO PENÉLOPE" (¿En qué punto tejés tu paciencia? ¿Con qué agujas? ¿Con dos o al crochet?)
No llegué a los veinte de Penélope pero durante años fui diván, madre, hermana, amante, fui la mujer de la vida de mi Ulises, la que más le duró pero a la que jamás eligió. Fui casi omnipresente pero jamás estuve presente y tejí tanto y perdí tanto tiempo contando los agujeros de los hilos sueltos que me quedé "como Penélope" y no se lo recomiendo a nadie. Hasta que un día me di cuenta de que si Penélope tejía la mortaja de Laertes, yo estaba tejiendo la mortaja de mi género y tiré las agujas a la mierda.
Basta de espera, basta de creer que “querrían estar con nosotras pero nos respetan demasiado como para condenarnos a un tipo como ellos” ES MENTIRA, les encanta tener brujas como Circe (aunque sin tanto chàrme) que les rompan las bolas y les conviertan los amigos en cerdos, o a ninfas ninfómanas que los esclavicen para poder victimizarse….¡Con nosotras, las pobres pelotudas Penélopes del subdesarrollo! Nosotras somos la meta para ellos, pero nunca el camino, ni siquiera una excursión. Somos aquellas que no son esposas, pero seguramente serán las viudas; no juramos estar con ellos en la salud o en la enfermedad pero es factible que terminemos curándoles las heridas; no somos nada y somos las mujeres de su vida… Paren paren… ¿De qué vida? Nononononononono, basta de Mujeres Penélope, basta de responder mensajes de texto o llamados telefónicos anacrónicos. No les demos cabida, porque la espera sin sentido es una maldición a la que sólo le supo poner poesía Serrat en “Penélope”, lo demás , sobra, amigas…créanme: SOBRA.
Tarea para el fin de semana: dejar de esperar, tomar el toro por las astas y no tocar una aguja ni por casualidad.
¡Ayayayayayayayayay! No hay caso, me está pasando lo mismo de siempre. No puedo dejar de pensar en Penélope después de que Ulises volvió. ¿Habrá sido feliz? ¿Le habrá gustado como antes? ¿Se habrá conformado y no se lo confió ni a Heródoto? ¿Se habrá quedado Ulises o su destino migratorio lo habrá obligado a buscarse otras hazañas?
No aprendo más, che. No aprendo más: ¡LOS FINALES NO TIENEN SEGUNDAS PARTES, NENA! SI TERMINAN BIEN, NO TERMINAN.
Ya lo saben: si ven venir en picada al Ulises que les haya quedado en algún cajón al lado de un papel viejo de chocolate Tofi o un boleto de tren…. ¡HUYAN! Búsquense un apolíeno héroe de carne y hueso y dejen que el otro se rompa los cuernos con la bruja que haya elegido cuando debería habernos elegido a nosotras, aunque más no sea para que le dijéramos que NO.
¡Nos vemos la semana que viene!
02 septiembre 2008
La Cofradía PRESENTA: "10 COSAS QUE ODIO DE TI" (del odio al amor existen la misma cantidad de pasos que del amor al odio y tenemos ganas de caminar)
Al principio pensé que otra vez los signos de puntuación me estaban jodiendo porque para mí, o las pausas estaban mal hechas en esa conversación o las pendejas estaban absolutamente limadas; pero, no, porque más allá de descubrir que eso de “se la comió” no aludía a las preferencias sexuales del Fulano en cuestión ni a una incipiente antropofagia, recordé que la Literatura y el cine avalaban esa locura.
Habemos algunos pocos elegidos que recordamos el poema que Catulo de la antigua Roma, le chafó a Safo de Lesbos (la griega) y que empezaba con estos versos: “Odi et amo”, en cristiano: “Odio y amo”… ¿Si los poetas viejos no se ponían de acuerdo, lo iban a hacer un grupete de mujeres adolescentes? Y al toque (¡Ups! Jerga adolescente contagiosa) recordé la película predilecta de uno de los miembros más jóvenes de esta Cofradía (que todavía llora por la muerte del protagonista de la peli, el bonito de Heath Ledger, ése que hace de Guasón en la nueva Batman), la película se llama “Las diez cosas que odio de ti”.
Una jovencísima Julie Styles y un novadísimo Heath encabezan este film de 1999 sobre la vida de los adolescentes americanos en una preparatoria en la que un excéntrico (Ledger) se enamora de otra freak (Styles) y la relación, que oscila entre el amor y el odio, culmina con una poesía que ella le dedica y que resume en diez versos lo que yo escuché en la plaza y lo que nos pasa cuando vamos y venimos por esa cornisa adrenalínica que nos lleva del amor al odio con pasaje abierto.
¿La analizamos juntas, amigas de la Progesterona? Tal vez nos entendamos un poco más o simplemente no nos sintamos tan solas en este mundo que no comprende nuestros “ni” o nuestros “So”. Ahí va:
“Odio la manera como me hablas y cómo te cortas el pelo” (Mentira. Esto hay que leerlo así: “Me derretís con el “Hola” y si estuvieras pelado, yo te pintaría los rulos a besos”)
“Odio tu forma de conducir mi auto” (Jajajajajajajajajajaja, mentira. Es así en realidad: “Si querés, llevate el auto. Yo me tomo un remís”)
“Odio cuando me mirás” (Pavadas. ¿A quién quiere engañar Julie Styles? Es así: “Si no me mirás, me cuelgo un cartelito de taxi Libre en la frente y aprendo a bailar reggeaton en el medio del patio del colegio. Además, cuando me mirás, mis amigas me llevan en frasquito hasta casa porque tenés el mismo efecto en mí que el sol sobre un helado de agua”)
“Odio tus tontas botas de combate y la forma en la que lees mi mente” (Traducción real: “Si te ponés el disfraz de Piñón Fijo igual estás divino y si me podés leer la mente entonces… miramemiramemiramemiramemiramemirame”)
“Te odio tanto que me enferma e incluso me hace rimar” (Trascripción: “Me hernié tratando de no amarte, nabo. Y no me importa que amarte me lleve a hacer rimas pelotudas como las de Belén Francese”)
“Odio como siempre tienes razón” (En realidad es: “Me fascina darte la razón porque te reís de costado, inclinando un poco la cabeza y me decís: “te dije, nena, que era como yo decía”)
“Odio cuando mientes” (Verdaderamente: “¡¡¡Mentime que me gustaaaaaaa!!!")
“Odio que me hagas reír y peor todavía, que me hagas llorar” (Mentira. Es así la cosa: “No necesito que hables para reírme porque te veo y se me pinta la sonrisa en la cara y no hay borratintas que me la saque de lugar. Además, si no me hacés llorar no tengo excusas para comer pizza y helado hasta el hartazgo y escuchar con mamá la edición aniversario de Air Supply para llorar con ganas”)
“Odio cuando no estás y que no llames” (Traducción al castellano: “Si no estás, los espejos de la casa no tienen razón de ser y si no llamás, voy al baño con el celular en la mano, dejo conectado el msn y habilito un servicio de palomas mensajeras sólo para que puedas comunicarte conmigo”)
“Pero principalmente odio no poder odiarte, ni siquiera ceca, ni siquiera un poquito, ni siquiera nada.” (ESTA QUEDA TAL CUAL, CHE, PORQUE ES ASÍ)
Cuando se estaban yendo de la plaza casi les digo que vieran esa película, pero después pensé que mejor me quedaba esperando al blanco del ciruelo y a septiembre. Se fueron cantando y saltando entre “Boludas” y “Lo amo”.
Mientras las veía alejarse no pude más que recordar que el “Temporis” como decían los romanos se te “fugit” de las manos entre amores y odios y que está bien que así sea después de todo.
Bueno, nenas, cualquier semejanza con la realidad (hoy, al menos) es absolutamente a propósito y si no vieron la peli y tienen de 13 para arriba en algún lugar del cuore, mírenla.
¡Nos vemos la semana que viene!