En tren de activar la memoria emotiva de mi niñez me puse a ver Indiana Jones y el Templo de la perdición, Indiana Jones en busca del arca perdida ...., Indiana Jones y la última Cruzada e Indiana Jones y la cruzada después de la última cruzada.
En fin, como el temita de las vacaciones es que uno tiene tiempo, me puse a pensar. Siempre me obsesionó esto de la realidad y la ficción y me di cuenta de algo esclarecedor que tal vez, sólo tal vez, se le escapó hasta al propio Steven Spielberg: Indiana Jones es el típico buscador de tesoros.
Ustedes dirán: "Pero qué novedosa la Buena Pipa, nos está dando una primicia"; sin embargo, aunque no lo crean, Indiana Jones representa a aquellos hombres que eternamente buscan un tesoro (entiéndase: mujer) y que cuando la encuentran, van en busca de otra que les genere el vértigo de la búsqueda.
Por eso hoy en LA COFRADÍA DEL OVARIO, La Buena Pipa analiza a los Hombres Indiana Jones o el arquetipo de los Buscadores de Tesoros.
A veces viajan kilómetros, hacen grandes gestos, parecen amables, te mandan correos electrónicos, están atentos, son atentos; a veces están cerca y a veces, solamente aparecen porque sí para rompernos la paciencia y el corazón en partes iguales.
¿Vieron como cuando en el colegio, cuando éramos chicos, cambiábamos figuritas y buscábamos la más difícil? Era un capo el que lograba conseguirla, aunque después la dejara fuera del álbum porque no se animaba a pegarla. Bueno, el Hombre Indiana Jones funciona así, en cinco pasos (lo avisamos como una especie de alerta a la comunidad de estrógenos que nos congrega para que los detecten y se salven de quedar fuera del álbum):
- Busca en el mapa (no importa dónde, a él no le interesan las distancias) y cual GPS hormonal rastrea su tesoro.
- Pone el marcador y se dirige hacia la figurita difícil y empieza el proceso de familiarización. Busca antecedentes; conoce gustos y hasta debilidades. Algunos aciertan de pura casualidad (no todos son tan preparados).
- Accede al tesoro, a las inmediaciones del tesoro. Puede competir con otros buscadores a quienes quitará del medio a cualquier precio y comienza el proceso de hostigamiento (algunos pueden llegar a enviar mails por toneladas o invadirnos el whatsapp) que puede llevar días, semanas, hasta meses. El Buscador de tesoros goza de la búsqueda, no del hallazgo. En criollo: llevan todo para el mate, hasta calientan el agua, pero no toman el mate porqueeeeee...les da acidez, dicen.
- Se acercan como Golum al anillo de Frodo, ladinamente. Esperan el momento adecuado y encuentran el tesoro. La búsqueda ha finalizado para el Hombre Indiana Jones y el círculo vuelve a repetirse, nunca es "la última cruzada" porque siempre va a haber tesoros por ahí. Y se va...porque no es valiente el que busca, amigas, es valiente el que se queda con lo que encuentra.
- Se vuelve al paso 1. Y así (como dice Buzz Lightyear) "Al infinito y más allá". LA figurita al cajón de los recuerdos. El tesoro al Museo y él otra vez al Google Earth de las relaciones amorosas.
Si están en la fase 2, están a tiempo: CORRAN. Si pasaron la tercera: les ofrecemos ayuda terapéutica o una ida al AutoMac a ahogar las penas en un Angus Bacon XXL. Tenemos agentes en todas partes del globo que pueden ayudarlas a dejar de sentirse como una muñeca en una vitrina: DIVINA PERO VACÍA.
Estamos a su disposición. No dude en llamarnos las 24 horas a este número que aparece en pantalla: 0800-MENEGAÑASTEMEMENTISTE o contactarse con nuestra web www.nososvossoyyo.com
Nos vemos,
LBP